Una obra didáctica de Agustín Galiana para comprender el Coaching Ejecutivo a través de obras de la literatura clásica
El objetivo con el que escribo este libro, “Relatos para Avanzar”, es triple: En primer lugar la divulgación de lo que es el Coaching Ejecutivo, ya que durante los más de 20 años de profesión como Coach, me he encontrado múltiples ocasiones donde vendían servicios de Coaching sin serlo; en segundo lugar, quería enseñar cómo es un proceso de Coaching Ejecutivo, donde he volcado todo mi buen hacer como Coach en un proceso de Coaching ficticio, pero dando un fiel reflejo de un proceso real; por último y en tercer lugar, reivindicar nuestra literatura clásica, como fuente de saber, para trasladar a la gestión empresarial, ya que la inmensa mayoría de la bibliografía que existe es anglosajona.
Así, y a modo de introducción, he de decir que desde hace poco más de 20 años la palabra coaching se ha hecho un hueco en el vocabulario habitual de las personas y se ha utilizado también de forma generalizada en las organizaciones. Tras la eclosión del concepto y su universalización como término, incluso coloquial, vivimos en este momento una etapa de consolidación de éste, de definición de los estándares de calidad requeridos en cuanto a las habilidades/competencias de los Coaches, de definición del código deontológico, de las herramientas utilizables, etc.
El Coaching nace hace algo más de 50 años. Surge en USA con el objetivo de aumentar el rendimiento individual (posteriormente grupal) de los atletas.
En la primera edición de “El juego interior del tenis” de Timothy Galway se sientan algunas de las bases de los paradigmas en los que se sustenta hoy el Coaching.
Así pues, desde hace más de 25 años hay un propósito (muy variado) de extender este tipo de intervención referida inicialmente al mundo del deporte a otros ámbitos. Este propósito ha dado lugar a los diversos caminos de desarrollo del Coaching, más allá del mundo deportivo, como son: en las organizaciones, en la educación, en lo personal, etc.
En general dicho propósito ha pretendido, en primer lugar, incidir en formas de mejora del desempeño, para que las personas sean más eficaces, es decir, sean capaces de lograr sus objetivos de la mejor forma para cada uno y de este modo conseguir resultados mejores. En segundo lugar, crear una metodología para la resolución de los problemas.
Para entender la historia del Coaching, hemos de darnos cuenta de que son muchos los pensadores, filósofos, neurólogos e investigadores que han contribuido al nacimiento y desarrollo de esta nueva profesión en la que confluyen numerosas teorías y prácticas con un objetivo común: favorecer el desarrollo del ser humano, desde un enfoque totalmente novedoso y sin antecedentes.
Es por lo que el coaching ha irrumpido en nuestro día a día con fuerza y dispuesto a quedarse. Y aunque tal y como dijo John H. Zenger: “la práctica del Coaching siempre tendrá muchas características comunes al arte: nunca dos personas lo practicarán de la misma forma”. En realidad, es así como personalmente lo vivo cada día en mi desempeño profesional: trabajo con una metodología rigurosa, pero, a la vez, vivo cada sesión de Coaching de forma especial, única e irrepetible.
Este libro en definitiva va dirigido a un público variopinto, pues todos somos susceptibles de ser Coach y de recibir Coaching, así puede considerarse de divulgación general del Coaching. Pero la intención principal, como se puede adivinar siendo Coach Senior, es que éste sea leído por Directivos y Directivas de cualquier ámbito y, en particular, aquellas que dirigen los departamentos de Dirección de Personas a los que su lectura les pueda aportar conocimiento en este campo.
Esta ayuda se puede traducirse en:
Para la persona:
- Crea espacio y tiempo para pensar y dialogar
- Te da un tipo de feedback diferente al que recibes de cualquier otra persona
- Te ofrece nuevas perspectivas sobre la realidad
- Obtienes mayor confianza y autoconciencia
Para la organización:
- Favorece el trabajo en equipo
- Potencia el talento individual
- Incrementa la creatividad
- Contribuye a la resolución de conflictos
- Mejora la adaptación a los cambios
- Aumenta la productividad
- Reduce estados de estrés y ansiedad laboral
Por último, quiero reivindicar la literatura clásica castellana como fuente de saber para la gestión empresarial, así en el texto uso los cuentos vertidos en el libro “El Conde Lucanor” escrito por el Infante Don Juan Manuel en 1325, de esta manera aúno la mayéutica con la reflexión producida por las historias contadas en este libro clásico y cómo se sacan conclusiones para problemas puntuales actuales, en un símil a cómo lo haríamos con la lectura de Sun Tzu (El Arte de la Guerra).
Para concluir, definitivamente estamos asistiendo a un avance espectacular en lo que al conocimiento del ser humano se refiere; estábamos muy atascados desde hace años y ahora por fin nos hemos puesto manos a la obra, sin miedos por soltar lo que creíamos que era nuestra confortable realidad y con la valentía de ser capaces de aprender, de aprender para cambiar.